Ingredientes:

Base de Galletas:

  • 250 g. de galletas tipo María
  • 50 g. de nueces peladas
  • 125 g. de mantequilla sin sal

Masa de Queso:

  • 500 g. de queso crema para untar
  • 400 g. de nata de montar (35% m.g)
  • 150 g. de azúcar
  • 2 sobres de cuajada
  • Leche para diluir la cuajada
  • 200 g. de fresas

Gelatina de Fresas:

  • 200 g. de fresas
  • 100 g. de azúcar
  • 1/2 limón
  • 1/2 sobre de gelatina neutra

Elaboración:

Para la mermelada de fresa, quitar los tallos verdes a las fresas, lavarlas y trocearlas. Disponerlas en un cazo y añadir 100 g. de azúcar y el jugo de medio limón. Mezclar bien y llevar al fuego para que hierva suavemente durante media hora. Para la base de la tarta, picar las galletas y las nueces peladas con la batidora y mezclar con la mantequilla derretida hasta tener una pasta homogénea. Cubrir la base de un molde desmontable con papel vegetal y repartir la mezcla de galletas por toda la base, apretando bien para que quede compacta. Guardar en el frigorífico para que la mantequilla cuaje. Para la masa de queso, mezclar el queso crema con la nata y el azúcar. Incorporar las cuajadas diluidas en un poco de leche, llevar al fuego hasta que hierva y retirar. Cortar algunas fresas en rodajas y disponerlas alrededor del molde, cubriendo el perímetro interior de éste. Verter la masa de queso sobre la tarta y dejar reposar en el frigorífico un mínimo de 4 horas. Para la gelatina de fresas, triturar la mermelada que tenemos al fuego. Agregar medio sobre de gelatina disuelta previamente en agua y verter sobre la tarta. Llevar de nuevo al frigorífico, unas 2 horas, hasta que toda la tarta esté bien fría y cuajada. Decorar con algunas hojas de menta, fresas y espolvorear con azúcar glasé.

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