INGREDIENTES
-
250 g de calamares limpios
-
12 langostinos
-
200 g de mantequilla
-
175 g de harina
-
1 litro de leche
-
6 dientes de ajo
-
1 cebolla pequeña
-
1 cucharada de pimentón picante
-
Empanado: harina, huevo, pan rallado y perejil
-
Aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta
ELABORACIÓN
-Pelar los langostinos, disponer las cabezas y caparazones a dorar, a fuego medio-alto, en una cacerola con unas cucharadas de aceite. Mientras tanto, retirar el intestino a las colas de los langostinos.
-Cuando las cabezas y caparazones estén bien dorados, aplastar para que suelten más sabor y verter el litro de leche. Tapar y apartar del calor para que la leche infusione.
-Será el momento de derretir la mantequilla en otra cacerola e incorporar los calamares y los langostinos. Dejar cocinar unos minutos a fuego medio-alto, hasta que cambien de color. En ese momento, escurrir bien con la espumadera, apartar, salpimentar y reservar.
-En esa misma mantequilla, sofreír la cebolla y los dientes de ajo picados hasta que esté todo bien pochado y tierno.
-Incorporar la harina a la cacerola y cocinar bien. Agregar 1 cucharada generosa de pimentón picante, remover y verter la leche colada, removiendo y cocinando durante unos minutos hasta que tengamos una bechamel homogénea y sin grumos.
-Agregar entonces los calamares y los langostinos bien picados, salpimentar generosamente y cocinar brevemente antes de retirar del calor.
-Extender en una fuente y cubrir con plástico o papel vegetal “a piel” para evitar la formación de la costra.Cuando haya perdido temperatura, introducir la masa en la nevera durante 1 día.
-Sacar porciones de masa fría, dar forma con las manos engrasadas en aceite y empanar; pasándolas por harina, huevo batido y pan rallado mezclado con perejil picado.
-Freír sumergiéndolas en aceite caliente hasta que se doren.