INGREDIENTES
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2 perdices
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500 g de judiones
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300 g de chorizo
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2 cebollas
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5 dientes de ajo
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2 zanahorias
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1 vaso de vino blanco
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40 g chocolate negro (opcional)
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Pimentón dulce, laurel y tomillo seco
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Aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta
PROCESO DE COCINA:
Partir las perdices por la mitad, salpimentar y dorar en una cacerola con unas cucharadas de virgen extra. (TRUCO: se pueden enharinar un poco para evitar que salpiquen) Apartar y reservar.
Trocear y, en el aceite anterior, dorar las cebollas, las zanahorias y los dientes de ajo. Dejar sofreír hasta que la verdura esté bien cocinada y tierna.
Incorporar entonces una cucharada de pimentón dulce y verter el vino blanco. Remover unos instantes, apartar del calor y triturar bien.
Volver a poner el sofrito en la cacerola con las perdices, 2 hojas de laurel y una cucharada de tomillo seco. Cubrir con agua, un pellizco de sal y llevar al fuego.
Escurrir y añadir a la cacerola los judiones, que hemos tenido la víspera en remojo, junto con el chorizo. Dejar que comience a hervir, a fuego fuerte, para retirar la espuma de la superficie. Bajar la intensidad y cocinar, a fuego medio, durante 90 minutos aproximadamente. (Es importante cortar la cocción de los judiones 3 veces; agregando agua fría o algunos cubitos de hielo en algunos momentos del proceso)
Una vez tengamos las legumbres y la carne tiernas, probar de sal y apartar el chorizo. Trocear y devolver a la cacerola. Echar además (opcionalmente) las onzas de chocolate y cocinar, a fuego suave, moviendo ligeramente la cacerola para que se derrita.