INGREDIENTES
Buñuelos fritos:
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150 g de leche
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90 g de mantequilla sin sal
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30 g de azúcar
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120 g de harina
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3 huevos
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1 cucharilla de extracto de vainilla
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Aceite de oliva virgen extra para freír
Crema de Chocolate:
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150 g de queso crema
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150 g de cobertura de chocolate negro (70%)
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1 cucharada de miel
Decoración final:
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1 tableta de chocolate blanco
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50 g de granillo tostado de almendras
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Mermelada de frutos rojos
PROCESO DE COCINA
Para la masa de buñuelos, calentar la leche al fuego junto con la mantequilla, el azúcar y un poco de extracto de vainilla.
Nada más comience a hervir, retirar del calor e incorporar la harina de un solo golpe. Mezclar hasta obtener una masa homogénea y con una textura de crema espesa. Llevar de nuevo al fuego, sin parar de mover, hasta que se forme una bola que se despegue bien de las paredes de la cacerola y que al tocarla con el dedo esté salga limpio. Apartar del calor y dejar enfriar unos instantes.
Agregar entonces los huevos, de uno en uno, y dejar reposar unos minutos.
Para la crema de chocolate, poner a derretir el chocolate negro al baño María.
Mezclar el chocolate derretido con el queso crema. Disponer en una manga pastelera con boquilla fina y reservar a temperatura ambiente.
Calentar aceite, en una sartén o cacerola con cierta profundidad, para que los buñuelos floten al freírse.
Mojar 2 cucharas en el aceite caliente, coger pequeñas porciones de masa lo más redondeadas posibles y echar en el aceite.
Dejar que se doren bien, apartar sobre papel de cocina para que escurran y rellenar con la crema de chocolate.
Para decorar nuestros buñuelos, derretir el chocolate blanco al baño María.
(Disponer unas cucharadas de mermelada de frutos rojos en la base de un plato, los buñuelos encima y terminar con un poco de chocolate blanco derretido, un hilo de miel y granillo tostado de almendras por encima)