INGREDIENTES
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750 g de carne de cordero
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3 dientes de ajo
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2 zanahorias
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1 cebolla
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2 berenjenas
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1 manzana
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Algunas pasas
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1 vaso de tomate frito
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1/2 vaso de vino blanco
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2 vasos de caldo de carne
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3 cucharadas de harina
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200 g de queso rallado
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Comino molido, canela en rama, nuez moscada y tomillo seco
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Aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta
PROCESO DE COCINA:
Sumergir las pasas en medio vaso de vino blanco.
Por otro lado, cortar las berenjenas en rodajas no muy gruesas y disponerlas sobre la bandeja de horno cubierta con papel vegetal. Salpimentar, regar con un chorreón de virgen extra y hornear, a 180ºC, hasta que estén tiernas.
Mientras tanto, picar la carne de cordero con ayuda de la picadora y reservar.
Cortar en pequeños dados y comenzar a sofreír, una sartén con unas cucharadas de aceite, la cebolla, los ajos y las zanahorias.
Cuando la verdura esté bien sofrita añadir la carne picada y la manzana, pelada y cortada en daditos. Verter el 1/2 vaso de vino blanco con las pasas, salpimentar y aromatizar con una pizca de comino y una rama de canela.
Cuando evapore el vino, agregar 1 vaso de tomate frito, mezclar bien y cocinar, 2-3 minutos, antes de retirar del fuego.
Disponer entonces rodajas asadas de berenjena en la base de un molde engrasado y extender la mitad de la carne encima.
Volver a poner otra capa de berenjenas, otra de carne y terminar con una última capa de berenjenas.
Para la bechamel, calentar 1/3 de vaso de virgen extra en una sartén e incorporar 3 cucharadas colmadas de harina. Mezclar hasta tener una masa homogénea e ir agregando caldo de carne, poco a poco, hasta obtener la textura de una crema ligeramente espesa. Salpimentar, rallar nuez moscada por encima y espolvorear con tomillo seco.
Verter sobre la musaka, cubrir con queso rallado y cocinar, unos 15 minutos, en el horno precalentado a 180º C.