Ingredientes:

  • 3 cebollas
  • 1/2 vaso de vino dulce
  • 1/4 Kg. de tomate cherry
  • 1 cuña de queso tierno
  • Orégano y romero

Para la Masa:

  • 350 gr. de harina de fuerza
  • 210 gr. de agua
  • 25 gr. de levadura
  • Azúcar
  • Aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta

Elaboración:

Picar las cebollas y sofreírlas en una sartén con 4 cucharadas de virgen extra. Cuando cojan color, añadir el vino dulce y dejar cocinar, a fuego medio, hasta que se evapore el líquido. Para la masa, disolver la levadura en el agua templada. Por otro lado, disponer en un cuenco la harina y una cucharada de azúcar. Agregar el agua con la levadura, una cucharada de virgen extra y un pellizco de sal. Mezclar bien y terminar de amasar con las manos. Dejar reposar en un cuenco engrasado, cubierto con plástico film y cerca de un lugar cálido, hasta que doble su volumen. Cuando la masa haya duplicado su volumen, romper la fermentación sacándola del cuenco. Estirarla y disponerla sobre la bandeja del horno cubierta con papel vegetal y generosamente engrasada. Presionar de forma suave con las yemas de los dedos y repartir por encima la cebolla dulce, los tomates cherry cortados a la mitad, algunos dados pequeños de queso, un poco de orégano y romero fresco. Salpimentar y pintar con un poco de aceite. Dejar reposar, unos 45 minutos aproximadamente, para que la masa se vuelva más esponjosa. Llevar entonces al horno, precalentado a 200ºC, entre 10 y 15 minutos, vigilando que no se dore demasiado.

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