INGREDIENTES
- 2 calabacines
- 1 pechuga de pollo
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 6 pimientos de piquillo
- ½ vaso de tomate frito
- Unas hojas de espinacas frescas
- 200 g. de queso rallado
- 100 g. de harina
- ½ cucharadita de levadura
- 1 huevo
- 1 copa de vino blanco
- Orégano
- Aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta
PROCESO COCINA
- Cortar dos calabacines en rodajas y comenzar a dorarlos al fuego con un poco de aceite de oliva virgen extra. Cubrir con agua y dejar cocer unos minutos.
- Para el relleno; Picar y sofreír la pechuga de pollo con un poco de aceite. Agregar la cebolla, los ajos y los piquillos; todo bien troceado. Verter una copa de vino blanco, salpimentar, dejar que se evapore el líquido y apartar del fuego.
- Escurrir los calabacines que teníamos cociendo y triturarlos bien con las hojas de espinacas.
- Ponemos en un cuenco el huevo, la harina con la levadura y una pizca de sal y de pimienta. Le incorporamos el puré de calabacín y ajustamos el espesor con un poco de agua; no debiendo quedar ni muy líquida ni muy espesa. Dejar reposar unos minutos a temperatura ambiente.
- Poner una sartén antiadherente al fuego con un poco de aceite. Cuando esté caliente echamos la masa, procurando que extienda por toda la superficie. Dorar por ambos lados y apartar.
- Rellenar las tortitas con el sofrito de pollo y hacer pequeños rulos. Disponer queso rallado encima y un poco de orégano. Llevar al horno a 180º C. hasta que se derrita el queso.
- Servir sobre la base de tomate frito.
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