– TIBET OLVIDADO: Se cumplen 50 años desde que el Dalai Lama decidiera abandonar Tibet, y las revueltas consiguientes fueran reprimidas por el ejército chino, cobrándose la vida de unas 85.000 personas. La ocupación de esa región por el régimen maoista se había producido diez años antes, pero el exilio del Dalai Lama marcó un punto de inflexión en la rebelión de los tibetanos. Desde entonces, la reivindicación de su independencia es constante, aunque apostando por los medios pacíficos para conseguirla. 50 años después, la situación está estancada. Tibet sigue perteneciendo a China, mientras que el Dalai continúa en el exilio, y las protestas, periódicamente se repiten.
– TOP MANTA: Un modo de ganarse la vida para unos, los manteros. Un acto de piratería para otros, los intérpretes y la industria del cine y el disco. El conocido como Top Manta proliferó hace unos años, y ahora es fácil encontrar en cualquier localidad a inmigrantes ofreciendo sobre una tela lo último en películas o música. A un precio barato, estas copias se han convertido en una competencia imbatible para el comercio tradicional de estos productos, y a ello achacaban las marcas, su gran caída en ventas, pidiendo el máximo rigor penal en la protección de la propiedad intelectual. La ley marcaba que por ejercer esta venta, se podía incluso ir a la cárcel. Una reciente sentencia no reconocía esta posibilidad; y el Congreso lo debatió el pasado martes, despenalizando el ejercicio de esta actividad, pues castigaba severamente a gente con pocos recursos.
– TORERO DE ARTE: Morante de la Puebla es quizás en la actualidad, el máximo representante de ese toreo calificado como artístico. Su modo de entender la tauromaquia es diferente. A sus 29 años, con altibajos, con idas y venidas de los ruedos, Morante se ha convertido en figura, reivindicando la belleza y la creación en sus faenas. Maestro con el capote, no por la variadad, sino por la plasticidad y cadencia; dominador de la muleta con ambas manos, representa al matador que busca la hondura, la pureza y el clasicismo. Un acercamiento al matador, que se ha visto envuelto en una polémica, precisamente, que relaciona arte y toros. Sus pensamientos, sus miedos, su modo de ver la fiesta, la pasión por este mundo, por el que desde niño se sintió irresistiblemente atraido.