– EL PRECIO DEL HAMBRE: Varias de las revueltas que se han vivido en los últimos años han tenido su origen en protestas por el incremento del precio productos básicos para la alimentación. Por ejemplo, en el Magreb en los últimos meses el trigo había subido un 50 %. En teoría, la excusa de la menor producción en Rusia por la sequía y los incendios, puesto que de allí se importaba ese cereal, pero en realidad, la mayor parte se debía a prácticas especulativas sin más. Lo mismo ha ocurrido con el maiz, el azúcar, la soja o el cacao que también se han encarecido de forma sensible. Los alimentos son materias primas que también se compran y venden en los mercados financieros internacionales, como el oro o el petróleo. Importantes fondos de inversiones han buscado en ellos alternativas rentables a otros negocios como el inmobiliario, obteniendo grandes beneficios.
– APOSTASÍA: La negativa del Arzobispado de Valencia de incluir las apostasías en sus libros bautismales, ha provocado un contensioso jurídico con la Agencia Española de Protección de Datos, sobre la consideración de esa información y sobre el carácter y contenido de esos registros. A instancias de un ciudadano ambas organizaciones entraron en un litigio que ha terminando en los tribunales. Tras fallos diferentes en la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo, se ha llegado al Tribunal Constitucional, que ha rechazado el recurso de amparo de la Agencia por entender que carecía de legitimación activa para interponerlo. Los defensores del derecho a la apostasía, creen que con ello se reduce la posibilidad de apostatar. Se entiende por apostasía la renuncia expresa a pertenecer a una religión, que en el caso de la Católica, se formaba parte por el bautismo.
– SENDAI Y CORIA: Están separadas por casi 11.000 kilómetros, pero son localidades hermanadas por un curioso episodio histórico. Todo comenzó en 1614 cuando el fundador de aquella ciudad japonesa, seguidor del catolicismo, decidió enviar una expedición encabezada por un samuai a Roma . Hizo escala en Madrid, y en Sevilla. Y algunos de los integrantes de la misma decidieron quedarse luego en Coria del Río a vivir. Ahora, casi cuatro siglos después, más de 600 habitantes llevan el apellido Japón como consecuencia de aquella circunstancia. Por ello, en pocos lugares de España se habrá sentido más el desastre provocado por el terremoto y el posterior tsunami que arrasó Sendai el pasado 11 de marzo. De hecho, en Coria del Río el Ayuntamiento declaró el luto oficial y las banderas ondearon a media asta en señal de duelo.